El sueño es una función vital de nuestro organismo sin la cual no podríamos vivir. La falta de sueño nos afecta a nivel físico y psicológico (cansancio, irritabilidad, menor capacidad de concentración…), por lo que dormir bien es tan importante como mantener una dieta equilibrada y practicar ejercicio regularmente para aumentar nuestra calidad de vida.
La Organización Mundial de la Salud recomienda dormir entre 7 y 8 horas diarias. Dormir menos horas de las recomendadas desemboca en un empeoramiento de la salud con los años. En este sentido, cabe recalcar que las horas no dormidas no se recuperan nunca, por lo que dormir mucho un sábado, por ejemplo, no compensa el sueño perdido entre semana.
Conseguir un sueño reparador está relacionado con una mayor esperanza de vida y nos permitirá reponer energías, controlar el estrés y mantener un buen estado de ánimo. Los tres elementos que indican una buena calidad del sueño son: duración, continuidad y profundidad. Así, además de dormir las horas adecuadas, los ciclos del sueño deben ser seguidos y sin interrupción además de ser lo suficientemente profundos para refrescar y restaurar.
Cuando pensamos en noches sin dormir, debemos recordar que nuestro cerebro no tiene la culpa de nada, ya que está diseñado para estar activo todo el tiempo, de forma que podamos recordar, anticipar, analizar, planificar, resolver problemas, etc. La mejor manera para resolver estos episodios de insomnio es aprender a calmar la mente para que pueda dormir bien, para lo cual te recomendamos intentar estas ideas:
- Buscar un momento del día (que no sea el de ir a dormir) para pensar exclusivamente en tus preocupaciones y buscar soluciones. Se trata de encontrar 15-30 minutos para dedicar a esa tarea que, una vez terminada, deberá dejarse de lado hasta el día siguiente.
- Otra idea que puede funcionar es escribir las preocupaciones en un papel para ordenarlas y poder valorar si son realmente graves. Verás que muchas no son tan terribles como parecen cuando nos invaden en la noche.
- A la hora de dormir, cierra los ojos y visualiza cada parte de tu cuerpo empezando por el recorrido de tu respiración. Siente como se va relajando poco a poco cada zona, subiendo desde los pies hasta llegar a los ojos. Conseguirás relajarte en menos de lo que crees.
- Si no eres aficionado a la lectura o simplemente quieres descansar tu vista, escucha un audiolibro, un podcast o música relajante. Al estar concentrado en lo que oyes, evitarás que tu mente se disperse o se desvíe y el sueño llegará mucho más rápido.
También pueden ayudarte a dormir mejor los comprimidos bicapa de Aquilea Sueño, desarrollados específicamente para que sus ingredientes se liberen a medida que son necesarios: la primera capa con melatonina se libera rápidamente al inicio del sueño, y la segunda capa lo hace de forma progresiva, dejando actuar los extractos de valeriana, pasiflora y amapola de California para un sueño reparador a lo largo de la noche. ¡Feliz descanso!
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Aquilea Sueño
Dormir bien es muy importante para nuestra salud física y mental. En muchas ocasiones, nuestro descanso se puede ver afectado por varias circunstancias que hacen que conciliar el sueño sea complicado o que nos despertemos por la noche. Ante este problema, es necesaria una solución natural que nos permita dormir bien y descansar plácidamente para despertarnos cada mañana con energía para afrontar el día.